[Evan] One Night Star

La noche había caído casi por completo, la oscuridad ahora abrazaba las calles, lo cual no se notaba de gran manera gracias a las luces de la ciudad, o quedaría mejor decir, por las luces de los burdeles y bares que rodeaban la zona, la misma razón por la cual tanta gente se encontraba reunida en el barrio, sin contar que ya era viernes, y viernes en la noche equivalía a fiesta.

- Siempre igual

Mumuró para si misma una joven de pelo castaño claro. Ella se quedó, lejos de la multitud, contra un poste de luz observando a jóvenes y adultos entrar en los establecimientos, o solo caminar por el lugar. ¿Su razón de estar ahí? Ninguna, no tenía planeado encontrarse con alguien y mucho menos entrar en ese tipo de lugares, por pura causalidad había llegado allí, y tampoco tenía nada mejor que hacer en esa noche.

Había pasado horas encerrado en el departamento, casi abrumado por la cantidad de papeles. Su Boss podía llegar a ser muy obsesivo y perfeccionista, cosa que odiaba en momento en que tenia que revisa diez veces los mismos papeles.

Finalmente harto del silencio del lugar decidió acercarse hacia alguna zona algo mas animada, pero el viernes noche el centro de la ciudad estaba repleto de extranjeros y chiquillos, y realmente no le agradaba ninguna de las dos cosas. Suspiró con cierto recelo al ver el bullicio en la calle.

Sorteó algunos de los clubs de alterne, y ninguno parecía convencerle. Pero al poco vio algo que llamó su atención, justo al final de la calle, donde acababa el bullicio y empezaban los barrios residenciales había una pequeña plaza. Solo dos bancos, tres árboles, una fuente y una farola. Eso bastaba. Se sentó en uno de los bancos, colocándose los negros auriculares, antes colgados de su cuello. Pensaba pasar ahí un poco de tiempo, hasta olvidar la tarea, que evidentemente retomaría después.

Observó el pequeño reproductor en su mano. Tanteó varias canciones hasta que dio con la que quería.




Doin' Good - Dok2

El ambiente seguía prácticamente igual de cuando había llegado, pero el bullicio de la zona había descendido en gran escala, al menos desde donde estaba. Camino unos pasos adelante despegándose de su querido poste de luz y se detuvo a la que su vista se fijó en alguien, alguien que le parecía bastante familiar, desde donde estaba no lograba reconocerlo aún así no le quitó la vista de encima, en un momento pensó que entraría a alguno de los establecimientos, para su sorpresa, el joven se sentó en uno de los bancos, al otro lado de la calle de donde ella se encontraba. El joven simplemente se colocó unos auriculares y se quedó allí; ella lo siguió mirando con curiosidad, al final decidió cruzar la calle quedando a algunos pasos de él, con las manos detrás de ella. Dudando sobre que decir.

- ¿Qué escuchas?

Finalmente dijo, regañándose metalmente por no ocurrírsele algo más ingenioso para empezar una conversación.

No sabía cuanto rato había pasado allí, pero empezó a notar la brisa en su rostro, cosa que indicaba el hecho del desvanecimiento de parte de la multitud. ¿Cómo lo sabía? Dejando a un lado su conexión con el elemento, era simple, cuando había gente en el lugar no corría ni el aire ni nada. Los cuerpos estaban tan apretados que del lanzar una moneda no tocaba el suelo.

Abrió perezosamente uno de sus ojos, casi como si tuviera miedo de ver que su predicción no era cierta. Para su sorpresa pudo ver, por así decirlo pues aun tenía la vista borrosa y somnolienta, la figura de una muchacha. Al parecer le estaba hablando, pero a causa de la música no logró entender.
Con cierta pesadez apartó los auriculares, dejándolos reposar tras su cuello.

- Disculpa, ¿Me preguntaste algo?

Era bastante probable que hubiera preguntado por una calle o similar, solía pasar en esos momentos.

- No pude oírte.

Sonrió afablemente señalando los auriculares, aún con pesadez y rastros de sueño en la mirada.

Esperó un momento a que le respondiera, por no haber sido una respuesta inmediata supuso fácilmente que no le había oído, se habría molestado sino fuera por dos razones, la primera, él estaba usando auriculares por lo tanto poco podría escuchar, y segundo, gracias a la voz de este, había reconocido de quien se trataba. De igual forma, actuó como si aún no lo reconociera, desvió la vista a un lado, y cuando la volvió se sentó a un lado de él en el banco.

- Nada relevante

Admitió reposando ambas manos en su regazo, viendo al famoso Bloody Rose de reojo.

- Me preguntaba que hacía un chico como tú aquí solo…

Le devolvio la sonrisa, quizás con algún toque de superioridad por haberlo reconocido más pronto que él a ella, o eso aseguraba.

Siguió a la chica con la mirada, casi como intentando saciar su curiosidad sobre los actos que seguirían. En esa ciudad era poca la gente que preguntara a extraños cosas “sin importancia” a esas horas de la noche. Pero fuera cual fuera la razón de su visita, no prestó interés, realmente tampoco se había preocupado acerca de la recién llegada, siempre había sido un despreocupado feliz, ¿Parte de su naturaleza? Todo es posible.

Ante la ultima frase de ella alzó una ceja, riendo por lo bajo algo divertido. Quizás por la pregunta en si o quizás por el tono de ella. Alzó el rostro, sonriendo felizmente, mientras con uno de sus dedos señalaba los auriculares. Esa fue toda su respuesta.

Tomó el pequeño reproductor, antes escondido en su bolsillos, subiendo el volumen de este, de tal modo que la canción fuera audible para todo el que estuviera relativamente cerca. Le dió al play, retomando desde el inicio la canción que estaba escuchando cuando llego al lugar.

- Yeah, I’m doin’ good,
Oh Yeah, I’m doin’ me
Oh everybody knows I’m livin’ a good life
No matter what anyone says, I’m walkin’ my own road”

La noche seguía agitada, la gente pasaba frente a ellos casi con prisa, como si cada minuto que perdieran jamás fueran a recuperarlo, como si después de esa noche solo hubiera la nada. ¿Absurdo? Quizás no tanto como pueda parecer.

- Yeah I’m doin’ good
Yeah I’m doin’ me
Oh everybody knows I’m livin’ a good life
No matter what anyone says, I’ll be here forever

No entonaba el total de la canción, era demasiado adecuada la voz del artista como para cubrirla con la suya. Solo algunas partes, las que más le gustaban y las que en parte respondían de algún modo, quizás rebuscado y irónico, a la pregunta de ella.

- I’m doin’ good baby I’m doin’ good
I’m doin’ good baby I’m doin’ good
I’m doin’ good baby I’m doin’ good
I’m doin’ good baby I’m doin’ good

Su mirada centrada en ese cielo oscuro. En su rostro una sonrisa curva, quizás algo altanera, igual que el brillo de sus ojos. Realmente se sentía orgulloso del camino que había elegido, sentía que así será dueño de sus pasos, de su camino. Siempre había sido un ser muy libre y rebelde.

Tuvo intriga por lo que el joven castaño planeaba hacer, cruzó las piernas acomodándose mejor, sin notarlo bajo la guardia al escuchar la melodía transmitida por los audífonos. En algún momento se dejaba llevar por la voz de Evan acompañando al cantante, podrían ser enemigos, pero la increíble voz del Underboss podría hacerla olvidar de ello, no lo admitiría en voz alta y se sentía tonta al pensar que el sonido más hermoso que había escuchado definitivamente era la voz del semi-angel cantando.

- I’m doin’ good

Repitió ella sin cantar. Cerró los ojos unos segundos, captando el significado de la canción, los abrió después, y sin mirarlo habló.

- … Eso solo me responde que estás muy bien y satisfecho con tus decisiones y el camino que escogiste para vivir…

Se reclinó contra el castaño para llegar a su oído, con cierta picardía.

- Pero no que haces aquí solo, Evan

Había optado por decir “Bloody Rose” pero aún tenía la guardia baja y además, su canción la había hecho reflexionar de alguna forma. Se alejó levemente, encogiendo las piernas y haciendo que sus pies descansaran en el borde del banco. Concentrando su vista en el edificio del frente, comenzó su propia melodía.

- With all those sacrifices
You had to make to get there
Would you say you're happy with your choices
Have your ambitions serves you well?

All the broken promises
That you never really got to
And all the people that you left behind
All the effort to replace them

See yourself you've come so far
But is it really who you are?
Did you ever think tomorrow…

Con su poder, manipuló la esencia de los antebrazos que se encontraban a cada lado de la banca, transformándolo en pequeñas enredaderas de rosas rojas. Bajó las piernas, descansando una mano en su regazo y la otra en una de las rosas, la cual aplastó antes de terminar la canción.

When it all falls down
And shatters on the ground
When your world comes crashing in
Will you begin to doubt?

Will you think you're wrong?
Standing tall when all is said and done
If you kill your dreams and leave them
To be prayers could you forget

Is it really all or nothing
Can't you really have it all?

Al igual que Evan, ella terminó mirando el cielo, solo que no sonreía, apenas si observaba las pequeñas estrellas que brillaban esa noche, acompañando a la media luna que se dibujaba en el cielo negro.


When it all falls apart - Alana Grace

Sonrió de medio lado, casi como divertido por los eventos acontecidos, pero no hizo más. No estaba nervioso, y creía que empezaba a entender quien era su compañera de asiento. Menudo par, enemigos y compartiendo el lugar como si nada pudiera llegar a pasar.

¿Qué estaba haciendo allí? Esa era una genial pregunta, realmente, nada.
Entreabrió los labios, como si fuera a decir algo, pero simplemente los cerró de nuevo.

- ¿Prefieres una respuesta realista o una edulcorada?

Y sonrió del mismo modo otra vez. No esperaría a que ella respondiera, evidentemente, era un hombre de acción.

- Huir de trabajo.

Finalizó, sin moverse, pero riendo levemente.
Estiró los brazos por encima de su cabeza, como acomodándose para escucharla, no era muy habitual que alguien decidiera cantarle. Pareció entender el sentimiento de esas letras, pero simplemente quedó quieto viendo el cielo. Dejando que la siguiente canción de su reproductor empezara a sonar, deseando dar a entender algún pedacito de su ser, pues al contrarío que algunos de su estirpe jamás había ocultado sus sentimientos o temores. Era demasiado sincero, quizás.




Tell me goodbye - BigBang

La pregunta la ayudó a entender que ahora ya la había reconocido a ella; generalmente cuando se encontraban en alguna situación así, solían dejar que sus armas hablaran en lugar de él, mayoritariamente era culpa de la castaña; ella siempre tan impulsiva, él siempre tan sincero.

Rió por la simple respuesta, al menos había sido directa. No era la primera vez que lo encontraba “huyendo” del trabajo, había aprendido gracias a él que su cappo era bastante estricto en cuanto algunas cosas… Aunque no podía decir lo contrario de Doratea, ella también sabía cuando atarearlos con trabajos y papeles.

- ¿Otra vez? Sí que eres vago a veces

Bromeo, no agregó nada más al escuchar el inicio de una nueva canción. Una vez más se removió en el banco, los aborrecía por ser tan incómodos, al final recostó su espalda contra le hombro de Evan, logrando así escuchar mejor la canción, de paso subió una de sus piernas.
Sin querer cerró los ojos, como sí así fuera más fácil captar el significado de la canción, podría ser la siguiente en su reproductor de música pero nada era un accidente. La melodía que acompañaba la letra la impactó en cierto modo, y no podía decir que la letra no, era tan profunda qu la historia había sido capaz de atraparla en segundos.

- Tengo que admitirlo, tienes buenos gustos en música

Halagó unos momentos después de que la canción había terminado, sin moverse de donde estaba, y sin mucho menos abrir sus ojos, de alguna manera se sentía bien así, por más raro o quizás erróneo que pudiese sonar.