Un nuevo curso

Por fin llegue al instituto nuevo, iba ya con el uniforme nuevo, el cual llevaban el resto de los alumnos. Mientras andaba se me notaba algo sonambulo aun, ya que no estaba acostumbrado a levantarme tan temprano. Algunos alumnos me miraban, seguramente sera por que soy el nuevo, y nunca me habian visto. Yo les miraba, y sonreia un poco, para tratar de ser amable. Cuando entre al centro vi lo grande que era, aunque no tan grande como el mio antiguo.

-Nicht schlecht (No esta mal).

Dije en aleman, luego comence a andar de nuevo, en busca de algun profesor para que me diga donde esta mi clase, y asi poder presentarme ante todos. Aunque preferiria no hacer nada y simplemente tumbarme de nuevo.

Caminé tranquilamente por los pasillos hacia la clase, casi todos los alumnos habían entrado ya, pero decidí esperar en la puerta, puesto que me habían informado de la llegada de un nuevo estudiante, y también de su raza. Sonreí al ver llegar a un chico peliblanco por el pasillo. Esperé a que llegara hasta enfrente de mi para mirar la lista, su nombre era Razer. Le miré tras mirar la foto que aparecía junto a los demás estudiantes de 4º de secundaria.

-You must be Razer ¿Right? -dije, hablandole en inglés, idioma que no debería tener dificultades para entender a esa edad. Sonreí- Come in...-dije sonriendo ampliamente, invitandole a entrar a la clase- Oh~! Yo soy la profesora de inglés así que no te sorprendas de mi acento...-dije esta vez hablandole en el idioma al que debía estar habituandose, el Italiano, sin embargo, mi Italiano estaba manchado de ese acento inglés, que a mi parecer lo hacía tan divertido. Esperé a que el chico entrara para cerrar la puerta de la clase y entrar para situarme a su lado. La clase aun no estaba llena, pero aun faltaban cinco minutos para el comienzo de esta, por lo que decidí esperar a que llegaran los alumnos para empezar a presentar a Razer- Esperaremos a que lleguen todos si te parece...-dije- Puedes escribir tu nombre en la pizarra mientras -le dí una tiza y me dirigí a la puerta de nuebo asomandome al pasillo, justo para ver entrar a los últimos alumnos y al fondo del pasillo vi llegar corriendo algo torpemente a una chica pelivioleta. Sonreí- Yoriko-chan, ¿me dará algún día el gusto de llegar temprano?-pregunté mientras la chica llegaba a mi altura.

Nos habíamos vuelto a dormir. Desde que Isabella no estaba nos pasaba constantemente. Cada día para ser sinceros. Me había levantado a las 7.45 y las clases empezaban a las 8.00. De un revuelo cogí en uniforme y me lo puse y acto seguido salí corriendo. Mariko y Stella no estaban. Su curso se había ido a no se donde exactamente. Seguía preguntandome el porqué de la repentina desaparición de Isabella, aunque ella dijera que se iba por unos días con su madre por qüestiones de trabajo seguía sin creermelo. Suspiré cogiendo el maletín con los libros y salí de la habitación cerrando la puerta. Corrí escaleras abajo entrando en el pasillo de la secundaria, giré la esquina y vi a Freya, la profesora de inglés esperando en la puerta. Suspiré al escuchar sus palabras y agaché la cabeza como soliamos hacer en japón para pedir perdon.

-Sorry Miss Freya...-dije como toda respuesta y entré en la clase, me senté en mi sitio y observé al chico que escribía su nombre en la pizarra. Era nuevo... ¿Sería de algúna raza extraña? Su pelo no era aquello que se dice de un color normal, claro que el mio tampoco... pero... Suspiré esperando la presentación del chico.

Me encontre con una mujer, que al parecer era una maestra. Ella me empezo a hablar en ingles, cosa que entendia perfectamente. Me dijo que entre, y que comience a escribir mi nombre en la pizarra. Justo cuando iba a empezar entro una chica, con el pelo violeta. La mire de reojo un momento preguntandome quien era, y luego volvi a mirar a la pizarra.

Razer Keildörfer

Escribi en la pizarra como me habia dicho la maestra. Despues me di la vuelta, y me coloque frente los alumnos de la clase. Mire tranquilamente hacia el frente, sin mirar a nadie en si.

Después de que Yoriko entrara cerré la puerta y me situé detrás de mi mesa, la mesa de profesor. Miré a Razer que había acabado de escribir su nombre en la pizarra y carraspeé girandome a mirar a la clase.

-Bueno, ahora que vuestra compañera Yoriko nos ha inundado de felicidad con su presencia, tomaré la molestia de no hablaros en inglés por unas fracciones de tiempo...-murmuré con expresión seria y voz sebera. Señalé a Razer con la mano abierta- Este es vuestro nuevo compañero, espero que le tratéis bien y con respeto. Viene transferido desde Alemania, así que quizá le cueste un poco habituarse al idioma. Él es "especial" como la mayoría de ustedes -expliqué- Razer, puedes presentarte a tu gusto...-dije mirandole.

Al escuchar las palabras de la profesora apareció un sonrojo en mis mejillas y rebufé. ¿De verdad había necesario aquel comentario ingenioso? Suspiré de nuevo mirando por la ventana. Mi mesa estaba justamente pegada a ella, y la mesa que estaba junto a mi, que debería haber estado ocupada por Isabella, estaba vacía. Maldecí en silencio al notar, que ningún otro sitio estaba vacío, y que por aquel día Razer debería ocupar el sitio de Isabella, pero solo por aquel día. O eso deseaba. Miré al chico que parecía intencionado a hablar y esperé su información.

Tras escuchar a la profesora hablando de nuevo sobre la chica de antes voltee mi mirada a la chica, viendo como le daba verguenza. Sonrei un poco mirando de nuevo al frente, respire hondo cerrando los ojos. Despues volvi a abrirlos mirando a los alumnos que estaban enfrente mia.

-Me llamo Razer Keildörfer. Tengo 16 años, y soy de alemania, mis hobies......no creo que tenga hobies interesantes asi que no hace falta decirlos. Espero que nos llevemos bien y, cuidar de mi.

Trate de sonar amable, aunque, se me notaba un poquito que no dominaba completamente el idioma. Aun asi, lo hice bien. Al acabar de hablar sonrei tranquilamente al frente y me gire a la profesora, arrascandome la mejilla. Estaba esperando a que diga que me puedo sentar.

Escuché a Razer mirandole con los brazos cruzados. Nada de hobbies interesantes... Por su apariencia parecía que su vida fuera monotona y casi aburrida. No se le veía del tipo de chicos que gustaba de meterse en lios ni nada de eso. Cuando acabó de hablar señalé la silla vacía junto a Yoriko.

-Puedes sentarte allí, junto a Yoriko, la chica del pelo violeta -dije manteniendo el brazo estirado señalando a la chica. Miré de nuevo al peliblanco.

Escuché al chico. Mientras seguía inmersa en mis pensamientos. Entonces caí en la cuenta de a que se refería Fraya-san con lo de "especiales". Me quedé mirandole. No parecia ser un espiritu maligno. Claro que hasta la persona más inocente puede ser un demonio. Teniendo en cuenta que Stella, la pequeña y adorable Stella era un semi-demonio. Él también podía serlo. Pero quizá por su color de cabello y de ojos se acercaba más a dragón. O quizá era un angel con lentillas. Pensé en Isabella, no, no era un angel, si fuera un angel lo habría notado, mi mejor amiga también lo era y sabía reconocer esa raza. Escuché lo que Fraya-san decia justo cuando estaba pensando en mi querida Bella. ¿Como que ocuparía el sitio de mi querida Bella-chan? No, nadie reemplazaría a Bella-chan. Vale, ya sabía que eso iba a pasar, pero, es que escucharlo era peor. Como acto reflejo me levante ruidosamente.

-Pero... Freya-san, aquí se sienta Bella -repliqué frustrada. La echaba de menos y quería que volviera, pero me paré a pensar, miré la clase calmandome y como había visto ya anteriormente, todos los sitios estaban ocupados. Suspiré- Aunque supongo que por hoy podría sentarse aquí, ya que Bella no está -me senté algo apenada y con el ceño fruncido.

Tras haber escuchado donde puedo sentarme me dirigi al sitio. Solo para poder observar como la chica, Yoriko, saltaba enfadada. Al parecer el sitio ya estaba ocupado. Yo me quede parado, frente la silla, mire a la chica que se habia vuelto a sentar, y luego a la profesora.

-Em...no me importaria sentarme en otro lugar..

Dije con voz baja, mientras me tocaba el cuello.

Miré a Yoriko en el momento en él que se levantó y escuché su queja.

-Yoriko, Isabella no está presente ahora -dije con voz pasiva para después girarme a la pizarra y empezar a escribir la estructura del pasado compuesto inglés. Me giré a tiempo de escuchar las palabras de pelibrlanco- No, te sentarás ahí, no hay otro sitio -volví a girarme para seguir copiando en la pizarra sin darle más importancia a ese echo. Isabella, para bien o para mal, no estaba, y Yoriko estaba obligada a entenderlo- Si te quedas más tranquila, cuando vuelva Isabella buscaremos otro sitio a Razer, pero por el momento, se sentará ahí...-dije sin girarme esperando oír como Razer se sentaba.

Miré al peliblanco y le sonreí forzadamente. No quería que ocupara el sitio de Bella, me sentía como si la estubiera reemplazando, aunque no era así de verdad. Quería a Bella de vuelta, y quería que ese desconocido desapareciera de mi vista. Me crispaba los nervios, pero haría un esfuerzo, porque yo era educada, y también tolearante.

-No. No importa, fue un impulso, puedes sentarte -dije y después miré a la pizarra, pasando a ignorar al chico, sumiendome en mis pensamientos. Esperé a que se sentará y me giré- ¿Eres un dragón cierto? -pregunté sin mirarle, susurrando. Sin duda, no era un angel. No tenía la deliciosa aura que presentaba Bella.

Escuche las palabras de la profesora, pero aun estaba dudoso, luego escuche a Yoriko, que decia que no pasaba nada, con una sonrisa en su rostro. Yo sabia que era falsa, pero no dije nada, simplemente me sente, mirando al frente tranquilamente. Poco duro la tranquilidad ya que Yoriko pregunto si era dragon. Yo la mire, algo soprendido. Sabia que no podia decir nada, pero...que hacer.

-¿Eh?....esto...

Busque las palabras adecuadas.

-Si...¿como lo sabes?

Dije susurrandole mientras le miraba tranquilamente. No sabia por que, pero sabia que ella no haria ninguna historia sobre esto, asi que lo solte.

Permanecí escribiendo en la pizarra con tranquilidad, no se oí nada en la clase excepto algún susurro. Escuché como Razer se sentaba y los murmullos se iban acallando. Me giré a mirar a la clase y empecé a explicarles las formas verbales, obviamente, hablando en inglés. Miré el reloj, la clase estaba por acabar, con todo el rollo de la presentación nos había quitado tiempo. Al sonar el timbre de finalización de clase mandé unos ejercicios de deberes.

-Bien, nos vemos mañana...-dije saliendo de por la puerta- Sed buenos...-añadí saliendo por la puerta de la clase.

[La profe abandona el tema~!!]

Después de haberle preguntado el chico pareció sorprendido cosa que no me sorprendió, pues estaba segura de que no le iban preguntando si era un dragón a cada paso que daba. Me quedé callada un rato hasta que sonó el timbré. Me apunté los ejercicios que Freya-san había mandado de deberes en mi agenda y me quedé sentada en la silla. La siguiente hora la tenía libre, y si no al tenía libre iba a saltarme la clase que tubiera. Miré el horario. ¡Oh! si, claro que iba a saltarmela, no iba a hacer Matemáticas ni loca.

-¿Vienes al Jardín?- pregunté levantándome de mi silla y caminando hacia la puerta- Hablaremos más tranquilos allí...-salí de la clase sin esperar respuesta del chico, y bajé hasta el jardín.


[ sigue aquí]